¿La máscara de algodón te ayudará a evitar la propagación del coronavirus?
En medio de la crisis del coronavirus, uno de los debates más importantes es sobre las máscaras: ¿qué tipo es el mejor? ¿Funcionan? ¿Deberías usarlos?
El viernes pasado, los Centros para el Control de Enfermedades recomendaban que se usen máscaras de tela cuando salgan en público. La investigación ha demostrado que las personas que no muestran ningún síntoma de COVID-19 aún pueden transmitir el virus y transmitirlo a otros. Las nuevas recomendaciones tienen el objetivo de evitar que estas personas infecten a otras sin saberlo; la idea es que una máscara de tela podría atrapar y absorber las gotas cargadas del virus para que no caigan en otra persona o superficie.
Solo hay un problema: no está claro si las máscaras de algodón o incluso las máscaras quirúrgicas evitan efectivamente que las gotitas del virus se propaguen del usuario al medio ambiente. Un estudio de Corea del Sur sugiere que estas máscaras podrían no ser particularmente efectivas para prevenir la propagación de la enfermedad.
En el estudio, que acaba de publicarse en Annals of Internal Medicine, los investigadores examinaron dos hospitales en Seúl donde los pacientes con COVID-19 llevaban máscaras quirúrgicas o de algodón. Los investigadores pidieron a cuatro pacientes con casos confirmados de COVID-19 que tosieran cinco veces cada uno en una placa de Petri sin usar una máscara, una máscara quirúrgica y una máscara de algodón. Luego, los investigadores analizaron las superficies externas e internas de la máscara. Encontraron partículas de COVID-19 en cada superficie que probaron.
Es difícil sacar conclusiones amplias de un tamaño de muestra tan pequeño. Otros estudios han demostrado que incluso las máscaras faciales rudimentarias causaron una disminución en la propagación del virus de la gripe en entornos abarrotados. Los investigadores en esos estudios concluyeron que cualquier máscara es marginalmente mejor que no usar nada en absoluto. Y, de hecho, incluso este estudio mostró que usar una máscara de algodón disminuía la carga viral de las partículas que terminaban en las placas de Petri.
Este nuevo estudio de Corea refuerza el hecho de que debemos ser cautelosos al confiar demasiado en el algodón y las máscaras quirúrgicas como una forma de frenar la propagación del coronavirus.
El distanciamiento social es la forma más efectiva de prevenir la propagación de la enfermedad, junto con la higiene adecuada de las manos. Se recomienda usar máscaras solo cuando las medidas de distanciamiento social son difíciles de mantener, como en supermercados y farmacias. Pero estudios como este sugieren que no debemos permitir que las máscaras nos adormezcan con una falsa sensación de seguridad. Incluso en estos entornos, las personas deben seguir vigilantes para mantener su distancia y usar desinfectante de manos con frecuencia.