Adelina Soto y sus dos hijas Adelina y
Andrea Pérez, se dedican a la enseñanza del arte. En su academia con más de 30
años de experiencia llamada “La Pintura”, dan clases a laguneros de todas las
edades y les enseñan a dominar diferentes técnicas artísticas. Acompañanos a
conocer un poco más de este amor familiar por el arte y su relación de madre e
hija dentro y fuera del estudio.
“Trabajar
con mis hijas es un gozo diario, estar
juntas haciendo lo que tanto nos gusta. Me llena de orgullo ver su entrega, dedicación
y el amor que le dan a sus alumnos.”
CH+ ¿Cómo surgió la idea de empezar una academia de arte? A.S- Desde pequeña, el Arte ha estado presente en mi familia de muchas formas, juegos, unión, trabajo, convivencia, estudio. Es desde ahí, que nace la necesidad de compartir esas habilidades a través de la docencia, nace entonces la academia que llamamos “La Pintura “.
CH+ ¿Qué es lo que más disfrutas de tu trabajo? A.S- Es ver la realización de cada artista al descubrir su estilo en cada obra
CH+ ¿Cómo es poder trabajar junto a tus hijas? A.S- Trabajar con ellas es un gozo diario de estar juntas haciendo lo que tanto nos gusta, me llena de orgullo ver su entrega dedicación y el amor que les dan a sus alumnos.
CONSEJO A MAMAS PRIMERIZAS: “Consideren el Arte una parte integral de la formación de sus hijos, ya que el arte puede llegar a expresar lo que las palabras no pueden.”
Andrea Pérez Soto
CH+ ¿El amor que tu mamá tiene por el arte influyó a que quisieras dedicarte a lo mismo? A.P- Sí, influyó muchísimo, siempre nos llevó a las clases de pintura desde chiquitas. Durante muchos años vi a mi mamá y a mi abuela dar clases, el arte se volvió parte de mí día a día, no me imagino haciendo otra cosa.
CH+ ¿Tienen en mente algún nuevo proyecto? A.P- Seguir en constante crecimiento personal y laboral, estar aprendiendo sobre nuevas tendencias, artistas nuevos y trabajar en mi persona para poder dar lo mejor que tengo a mis alumnos.
CH+ ¿Cómo es trabajar junto con tu familia? A.P- Muy gratificante, es un constante crecimiento personal para todas. Con los años hemos aprendido a escucharnos, ser flexibles con otras formas de pensar y a comunicar todo; lo que nos gusta, lo que nos hace falta mejorar y lo que queremos cambiar, para seguir siendo el equipo que hemos sido durante tantos años.
“Mi
mamá, es una persona sumamente trabajadora. Ahora que soy mamá entiendo lo
difícil que puede ser balancear casa, trabajo y cuatro hijos, siendo siempre
tenaz, dedicada en su trabajo y al servicio de las demás personas, sin duda es
un ejemplo a seguir.”
Adelina Pérez Soto:
CH+ ¿A qué edad descubriste que querías dedicarte al arte? A.P- Desde muy pequeña veía a mi mamá y a mi abuelita lo mucho que disfrutaban el arte, pintar, hacer sus cuadros, dar clases… y al estar con ellas en ese ambiente, me di cuenta que a mí también me gustaba mucho.
CH+ ¿Qué es lo que más te inspira al momento de pintar? A.P- Me inspira el sentir que la prisa, el ruido del día a día, la rutina y el reloj se detiene, eso me hace sentir paz, inspiración y despierta mi creatividad.
CH+ ¿Cómo es la relación de mamá e hija en el trabajo? A.P- Nos llevamos súper bien, somos muy organizadas, tenemos buena comunicación y hacemos muy buen equipo.
Anécdota: “Una de las anécdotas que más me acuerdo fue hace unos años un niño de más o menos 7 años quería pintar un gato en la técnica de gis seco. Primero hizo el dibujo del gato, le quedó muy bien, después le expliqué que tenía que ir poniendo pelo por pelo, para que el gato quedará más realista; se quedó trabajando muy inspirado y contento haciendo pelo por pelo del gato, después de un rato vuelvo a su lugar para ver cómo le iba quedando la técnica y noté que había hecho una mancha negra en todo el trabajo; le pregunte a Mario ‘¿qué pasó con el gato?’ y él me respondió: ‘el gato se cansó y ya se fue.’
Me encantó su contestación, me enseño lo simple que puede ser la solución de un problema utilizando nuestra creatividad.”